Receta de Chicharro en adobo

Una técnica muy española de preparar los alimentos es el adobo, y el chicharro en adobo queda delicioso por el sabor peculiar del pescado. Habitualmente, se sumerge un alimento crudo en una salsa o caldo preparado con distintos ingredientes, como pimentón, vinagre, orégano, ajo y sal. En tiempos antiguos este método se usaba para conservar productos durante más tiempo, como es el caso de muchos pescados azules.

En el caso de carnes y pescados, tradicionalmente si había excedentes se hacía necesario echar mano de estas técnicas para que no se pudrieran. Los adobos se hacían y se hacen sobre todo con pimentón, ya que este producto contiene propiedades antibacterianas que frenaba la rápida descomposición. Realmente en la actualidad no se usa el adobo para conservar, sino para realzar los sabores de los alimentos antes de cocinarlos.

Por su parte, el chicharro es un pescado azul de alto contenido de nutrientes, omega 3, proteínas y minerales, originario de aguas atlánticas y mediterráneas. Es un tesoro culinario por muchas razones, pero sobre todo por su sabor y su asequible precio, aunque no sea tan elegante como el salmón o el mero. Pero resulta un gran aliado en la cocina.

Ingredientes:

Cómo preparar este chicharro en adobo:

1. Limpiar los chicharros y cortarlos en rodajas.
2. En el vaso de la licuadora, mezclar todos los ingredientes menos el aceite, el laurel y la harina, a velocidad alta, hasta que se integren.
3. En un bol se colocan las rodajas de pescado, se le añade el adobo hasta cubrir por completo. Agregar las hojas de laurel. Tapar y dejar marinar por al menos 1 hora, pero si es más será mejor.
4. Al cabo del tiempo de marinado, escurrir el pescado y enharinarlo.
5. En una sartén poner suficiente aceite para freír, y cuando esté bien caliente se meten las rodajas de pescado. Se fríen hasta dorar por ambos lados.
6. Reservar en una bandeja con papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.
7. Servir inmediatamente.

El chicharro en adobo resulta perfecto para un buen almuerzo, acompañado de una ensalada fresca y un puré de patatas. También lo puedes servir para picar, cortando el chicharro en trozos más pequeños antes de ponerlo en el adobo.